Editorial N°8 – Año 1 – Noviembre de 2015 – LA MUERTE
Una de las interrogantes esenciales del ser humano es cuál es el límite de lo que entiende por vida. ¿Es la muerte el fin de ella o es sólo el paso a otro estado?, ¿otra forma de estar en el mundo? Ensayando respuestas ha debido incluso plantearse qué mundo es ése, ¿es todo lo que conocemos o hay más? Sea cual sea la explicación que mejor haya saciado la inquietud del clan en las etapas más arcaicas o de la nación en las más modernas civilizaciones, lo que parece bastante claro es que ella determina la forma de organización que se den estas comunidades, regula la relación entre los individuos y rige aspectos de su cotidianeidad. Porque intentar comprender la muerte es indagar en la vida.
La cuestión puede abordarse desde las disciplinas que estudian al hombre, y tanto la historiografía como la etnografía han registrado con atención manifestaciones concretas e inmateriales que nos permiten rehacer el mapa -geográfico, conceptual, temporal- de las creencias y ritos relativos a la muerte edificados hasta hoy; pero también es posible rastrear estas prácticas y su filosofía en el arte. Ambos acercamientos intentamos en esta edición de AguaTinta, para lo cual recogimos el punto de vista de la antropología y la historia, así como su reflejo en la pintura, la literatura, la fotografía y el cine.
Lo más interesante de este ejercicio es tratar de establecer cuánto de nuestra concepción de la vida y de la muerte, del paso de una a la otra, pueda ser un constructo colectivo, que responde a un corpus normativo y cultural, y cuánto pueda ser una elaboración individual. No por nada, si bien la ritualidad es aprendida, la muerte es y seguirá siendo una experiencia personal.
Les invitamos a acompañarnos en este breve repaso por el luto y la conmemoración, por el temor y el respeto. En noviembre, AguaTinta está de muerte.
revista@aguatinta.org